Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) se define la salud como “el estado de pleno bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad”.

De forma general, se relaciona alimentación con salud. Los alimentos nos aportan nutrientes, sustancias que necesitamos para el mantenimiento de la salud y la prevención de enfermedades, por tanto, el acto de ingerir alimentos no debería suponer un problema para la salud.

Sin embargo, hay un porcentaje de la población a quienes tomar ciertos alimentos les produce efectos adversos e incluso graves para su salud. Se trata de las alergias e intolerancias alimentarias.

Alergias alimentarias

Los alérgenos alimentarios son compuestos que pueden encontrarse en los alimentos que consumimos y dañan la salud de algunos individuos.

Se trata de sustancias que en un principio son inocuas, pero que provocan una reacción exagerada del sistema inmunológico en personas sensibles a ellos, llamadas alergias alimentarias. En ocasiones esta reacción adversa está predispuesta genéticamente en algunos individuos.

Intolerancias alimentarias

Los alérgenos alimentarios también son responsables de otras reacciones adversas en las que el sistema inmunológico no interviene, llamadas intolerancias alimentarias.

Las intolerancias alimentarias son reacciones que se producen cuando el organismo no puede digerir correctamente el alimento o uno de sus componentes, pudiendo ser diferentes en función del alimento de que se trate.

Control de los alérgenos en los alimentos

Debido al problema de salud que plantean en las personas sensibles, las alergias e intolerancias alimentarias deben gestionarse de una manera efectiva. Las principales herramientas empleadas son la prevención y la educación.

Se necesita establecer medidas adecuadas para asegurar que las personas con alergias e intolerancias pueden acceder a alimentos seguros y, que estén informados sobre la naturaleza y composición de los mismos.

De esta forma se desarrolló normativa europea para mejorar la información sobre alérgenos que aparece en el etiquetado.

Reglamento (UE) N°1169/2011

El Reglamento (UE) N°1169/2011 del Parlamento Europeo y del Consejo de 25 de octubre de 2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor, es de aplicación a todos los alimentos destinados al consumidor final, incluidos los servidos para colectividades.

Recoge que la información sobre alérgenos en alimentos debe ser clara y accesible para el consumidor, ya sea de forma escrita, oral o mediante dispositivos electrónicos.

Aunque exista una elevada cantidad de alimentos que pueden causar reacciones alérgicas en las personas, el reglamento establece una tabla con los 14 alérgenos de declaración obligatoria.

Tabla de alérgenos alimentarios:

Tabla 14 alergenos

En este reglamento se establece que las sustancias que causen alergias o intolerancias deben indicarse en la lista de ingredientes, destacándose mediante una composición tipográfica que la diferencie claramente del resto de ingredientes. En el caso de no haber lista de ingredientes, debe aparecer la mención “contiene” seguida del alérgeno.

Así mismo, los establecimientos que se dediquen a la hostelería o venta de alimentos y bebidas sin envasar, están obligados a informar a los consumidores si contienen alguno de estos 14 alérgenos alimentarios.

Industrias alimentarias

Las industrias alimentarias realizan un gran esfuerzo, llevando a cabo una gestion de alérgenos eficaz que tenga en cuenta todas las operaciones que intervienen en el proceso.

Gestión alérgenos

De este modo, las industrias alimentarias pueden asegurar la inocuidad de los alimentos que elaboran.